Es un proceso que aporta información útil de las áreas en proceso tales como las perceptibles, cognitivas, socio-afectivas, emocionales y académicas de niños, adolescentes o adultos mayores.
Es un proceso que aporta información útil de las áreas en proceso tales como las perceptibles, cognitivas, socioafectivas, emocionales y académicas de niños, adolescentes o adultos mayores, quienes podrán así orientar sus acciones para satisfacer las necesidades educativas, cognitivas, emocionales y afectivas del evaluado (a quien nos referiremos como paciente).
Este proceso conlleva las siguientes partes: entrevista inicial con los padres de familia, observación en campo del paciente, citas con el paciente para la evaluación con pruebas científicas, formales e informales, entrega del informe a los padres y la entrega del informe a la institución dado por el psicopedagógo a cargo del caso.
La evaluación psicopedagógica tiene un carácter preventivo y de aprendizaje de estrategias específicas ya que, aunque se centra en el caso de pacientes concretos, las conclusiones que emanan de la misma pretenden la mejora del proceso de enseñanza aprendizaje.
La evaluación psicopedagógica se plantea, después de que los profesores, la Administración, padres o familiares detectan una situación o problema que no se ha podido resolver a través de los procedimientos y recursos ordinarios o cuando se requiere una opinión técnica-profesional fundamentada para tomar alguna decisión que afecta al futuro del paciente.
Finalizado el diagnóstico se procede a la intervención psicopedagógica hacia la familia, el paciente y las orientaciones académicas a la institución.
