Para la mayoría de los padres con niños con déficit de atención con o sin hiperactividad, las tareas se convierten en las pesadillas de su existencia. Para los niños sin TDAH, la tarea no es nada fácil tampoco, pero no se pasan horas luchando con sus padres para poder hacerlas. Todo el proceso de preparación desde el momento en que se ha asignado, hasta el momento en que se terminó de hacer, es complejo e implica conductas que son difíciles para los niños con TDAH.
El proceso que debe hacer el niño o niña es el siguiente:
- Para empezar, el niño debe oír la tarea de la docente.
- Entender lo que debe hacer.
- Escribir correctamente en su cuaderno la tarea asignada.
- Debe decidir qué artículos necesita para llevar a casa y guardarlos en su bulto, sin olvidar nada.
- Resistir la tentación de mentir acerca de tener deberes, resignándose a hacerlo sabiendo que va a perder la oportunidad de divertirse.
- Sacar las cosas del bulto, buscar el cuaderno de tareas, priorizarlas y organizar los materiales.
- Luego iniciar la tarea donde requiere de: ATENCIÓN, CONCENTRACIÓN, ORGANIZACIÓN, ESTRUCTURA, PRIORIZACIÓN.
- Resistir a las distracciones.
- Además de esforzarse en las tareas aburridas y tediosas.
- Escribir en forma lenta para que su letra sea legible.
- Al finalizar su tarea, nuevamente preparar su bulto y que nada sea olvidado en casa.
Cada paso representa un reto para los niños y niñas y una oportunidad para los problemas y conflictos, donde se ve afectada toda la familia; recurran a los especialistas (psicopedagogos) para que les ayuden con estrategias, técnicas, apoyo emocional y pedagógico.