“País tiene en abandono la salud mental de sus adolescentes”
Por. M.Sc. Vivian Pérez Echeverría
Si bien es cierto, estamos atravesando muchas problemáticas en nuestro país; económicas, sociales, educativas y de salud. El reportaje nos hace un llamado indicándonos que los adolescentes están en abandono, no hay entidades hospitalarias que atiendan a esta población (refiriéndose a problemas alimentarios), que se les remite del Hospital Nacional de Niños al Hospital Nacional Psiquiátrico, donde no son recibidos, luego son remitidos al Hospital México donde el centro hospitalario no está preparado para atenderlos y además para cerrar con broche de oro pasan un promedio de dos meses hospitalizados y volverán de nuevo a sus doctores del HNN, creándoles aún más una inestabilidad emocional además de un retraso en su educación.
Los trastornos que más los afectan son:
- Problemas de aprendizaje (3.186 casos).
- Trastornos afectivos (2,741 casos).
- Trastornos de conducta (1.301 casos).
- Trastornos de ansiedad (1.009 casos).
- Trastornos de alimentación (920 casos).
El señor Marco Díaz psiquiatra a cargo del Programa Integral de Atención del Adolescente (PAIA) de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) nos dice: “acostumbramos definir la adolescencia como un periodo libre de enfermedad, si bien es cierto que tienen menos problemas físicos que los adultos, tienen enormes dificultades a nivel emocional, adaptativo y social”.
Entonces vamos a lo siguiente, Costa Rica es un país con una preparación profesional de muy alto nivel en cualquier rama profesional.
Hoy en día tenemos profesionales en psicología, psicopedagogía, orientación, trabajo social. Por qué entonces no damos ese aporte profesional dentro de las mismas instituciones educativas, como una educación orientada a la prevención, de acoger a todos estos adolescentes dentro de sus instituciones para un “diagnóstico, evaluación , y estrategias” para sobrellevar los problemas que presentan.
La educación y la formación de nuestros estudiantes está el progreso del país, hago un llamado al Ministerio de Educación Pública de Costa Rica (MEP), a introducir en las instituciones públicas y privadas como requisito de personal a nuevos profesionales para conformar equipos multidisciplinarios que trabajen para el bienestar de nuestros adolescentes, creando códigos de trabajo para los psicopedagogos (que aún no existen) y replanteando las funciones de cada profesional institucionalizado (psicopedagogos, psicólogos, orientadores, educación especial, trabajadores sociales), como un equipo de apoyo al docente, a la dirección y a los padres de familia, al servicio de los estudiantes, para la prevención de los trastornos anteriormente mencionados; los cuales pueden ser tratados desde el aula, desde la institución para beneficio del país entero y utilizando los recursos económicos de una forma eficiente para disminuir estos males en los adolescentes, que se vería reflejado en menos gastos a nivel hospitalario. Este equipo trabajaría con objetivos claros, detectando y atacando los problemas desde su raíz y colaborándole al docente en los programas académicos y didácticos, para lograr una formación integral, donde se les ayude a los adolescentes a superar sus barreras emocionales, de aprendizaje y conductuales, creando dentro del mismo currículo los apoyos necesarios, no solo en materia académica, sino en materia de competencias, habilidades y destrezas a desarrollar para crear ciudadanos que puedan enfrentarse, resolver y dar respuesta a la sociedad que nos exige tanto.
Y sí tenemos profesionales calificados porque no damos el paso, abramos nuestras mentes al trabajo colaborativo, de un equipo que hable el mismo idioma cada uno en su especialidad y aportando sus propios conocimientos.
Digámosles a nuestros adolescentes si se puede, y ustedes pueden alcanzar ilusiones que los lleven a metas reales, superando la problemática de cada uno y haciéndoles sentir y que crean ellos mismos que si se puede.
