Para enseñarles a nuestros niños el significado de independencia y libertad, debemos de darle la oportunidad de que hagan, es decir independencia para pensar, actuar y reaccionar; libertad para hacer, ser y esperar. Permitirles independencia suficiente para equivocarse y la libertad suficiente para tropezar. Pero siempre quedándonos detrás de nuestros niños con los brazos abiertos, por si tenemos que amortiguar la caída.
Darles mucha independencia al principio puede asustar a los niños y niñas, demasiada libertad puede hacer sentir al niño abandonado y inseguro.
Para crecer, los niños necesitan la oportunidad de equivocarse y aprender a no volver a cometer el mismo error.
Como padres y docentes debemos protegerlos de peligros reales, pero no debemos sobreprotegerlos al punto de que ellos nunca tengan la oportunidad de aprender las habilidades necesarias para no repetir sus errores.
Mañana veremos: “Pasa tiempo con tus hijos”!!!!