Igual que cuidamos de nuestra dieta y nuestro estado físico, hemos de cuidar de nuestra mente, pues si no la activamos dejará de estar ágil y despierta, y nos costará más tomar decisiones, prestar atención, memorizar tareas, etc.
Calcular mentalmente, memorizar números de teléfono, realizar sudoku, sopas de letras, autodefinidos, dibujar, leer, ordenar los armarios y cajones de casa, planificar el menú semanal y la compra diaria… son tareas cotidianas que ayudan a mantener una mente activa, aunque se pueden seguir programas de entrenamiento diseñados específicamente para mantener y mejorar las funciones cognitivas.
Extracto Tomado del blog: Estimulación Cognitiva (http://www.estimulacion-cognitiva.com/2013/01/22/nuevos-habitos-y-buenos-propositos-para-empezar-un-ano-saludable/).