“La disciplina es una virtud que modifica a quien la práctica
y también al medio ambiente donde se ejerce”
La disciplina es un proceso, donde se educa al otro y tiene normas y límites que respetar. Es también la capacidad de mantener el orden, la ética y la moral.
La falta de disciplina es un factor común en todas partes del mundo, lo que marca la diferencia es la capacidad que tenemos para direccionar las conductas a un camino positivo.
Sin disciplina el aprendizaje no se logra, hay que aprender a controlar el orden tanto en casa, aula, supermercado, fiestas de cumpleaños etc., en beneficio del niño y la niña; para formar un mundo de niños grandes, responsables de sus actos y que aprendan a asumir las consecuencias de un mal comportamiento.
Tanto docentes como padres debemos comprometernos a poner límites en beneficio de la educación de sus hijos, trabajo difícil de realizar porque debemos de anteponer el razonamiento antes del sentimiento hacia nuestros niños y niñas.
Los niños y niñas no van a rectificar la mala conducta hasta que seamos nosotros (los adultos) los que cambiemos de actitud respecto a la responsabilidad, límites. Recuerden conocer en qué etapa de desarrollo emocional, físico, cognoscitivo y social se encuentran sus niños, para así tener una adecuada reacción y cambio según su desarrollo.
Los padres son un brazo de la continuidad que se da en la escuela con respecto a este tema, en muchas ocasiones por nuestra tendencia de “proteger a nuestros niños”, perdemos la objetividad ante los hechos.
Les daremos varios consejos que los padres no deben hacer o decirles a sus niños con respecto a sus maestros:
- Nunca amenacen de forma violenta a los docentes.
- No adoctrinen a sus hijos en contra de la escuela o docentes.
- Siempre asistan a las reuniones con objetividad, no vaya como sintiéndose amenazados, la institución desea lo mejor para sus hijos.
- Si tiene alguna duda de una calificación o nota que le enviaron a su hijo; no lo comente con él o ella, saque lo más pronto posible una cita con el docente para conversar sobre lo ocurrido.
- Si ustedes como padres de familia desvalorizan la imagen de la escuela, sus hijos tendrán poca estima a sus docentes.
- Si su hijo presenta alguna mala conducta y ustedes no colaboran con la institución y las medidas disciplinarias que se ejecutan (ir a reuniones, ver nuevas estrategias, estimular de forma positiva al niño o la niña), lo único que estarán provocando es que esa conducta se haga más agresiva y peligrosa.
- Si la institución aplica una medida disciplinara y en la casa no existe ninguna sanción y se descalifica la medida que tomó la institución, para el niño o niña una suspensión momentánea es vista como unas minis vacaciones o un recreo largo, predisponiendo esto para continuar con su conducta desordenada.