1. Organize el espacio de la clase para que pueda moverse con facilidad y acercarse a cada estudiante. Intente la forma de U.
2. No importa que en el aula existan sonidos. Podemos tener sonidos de fondo que ayuden a los niños a estimular sus funciones cognitivas, y otros sonidos que pueden tranquilizar a los niños inquietos. El Dr. Harlen Hensen, de la Universidad de Minnesota, explica, » un buen sonido significa un buen aprendizaje, un mal sonido significa que los niños estan fuera de control». Cuando no hay ruido implica que los adultos no entienden la naturaleza de los niños «.
